El centro de acogida de mujeres maltratadas de Fabero, que en la actualidad alberga a seis mujeres y diez niños, está al borde de su capacidad.
El incremento de solicitudes de ayuda en la Comunidad Autónoma ha hecho que las plazas de las que dispone la red de Castilla y León sean insuficientes para hacer frente a las peticiones.
La responsable del centro reclamó más ayudas a las administraciones para hacer frente a la importante demanda que hay de acogida en Castilla y León.
Este centrono sólo requiere más espacio sino que también necesita aumentar tanto el personal como el voluntariado y los recursos económicos.
La responsable del centro lamentó la decisión de la Junta de recortar hasta la mínima expresión los fondos del plan Dique, una iniciativa que permitiría a las mujeres maltratadas acceder a un puesto de trabajo, la única vía que abre la reinserción social de las víctimas.
La Crónica de León
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