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jueves, 14 de agosto de 2008

El carbón nacional gana la carrera al importado

El precio del carbón internacional se duplicó en el último año por la crisis

La escalada de los precios del petróleo, y el nuevo mapa estratégico mundial de la producción y el consumo energéticos han dotado momentáneamente al carbón autóctono de unas condiciones de competitividad inusuales hace muy poco tiempo.
El gran aumento del coste del carbón de importación, que ha visto cómo el precio se ha duplicado en el último año hasta llegar a alcanzar los 200 dólares por tonelada, y del gas, hace que el coste medio de producción de un megavatio/hora sea de 77 euros con carbón importado, 64 euros con el gas y 59 euros con el carbón nacional, según se desprende de los datos que maneja el sindicato asturiano SOMA-FIA-UGT.
Este sindicato estima que el coste de producción eléctrica utilizando carbón nacional oscila entre los 58 y los 59 euros por megavatio/hora, cifras que en una primera lectura hacen pensar queel carbón autóctono es a fecha de hoy más rentable para las centrales térmicas, como Compostilla y Anllares, que la generación a base de carbón de importación. Sin embargo, para calcular la rentabilidad de manera global, habría que tener en cuenta otros factores, como la eficiencia de las instalaciones, su vida útil o el impacto ambiental.
Empresas como Endesa pagan unos 80 dólares por tonelada, mientras que el carbón de importación, con los costes de transporte imputados, pasó de costar unos 70 dólares por tonelada a situarse en los 130 dólares y todo apunta hacia los 200 dólares. Subida motivada en gran parte por el aumento de la demanda de países emergentes, principalmente China e India, y por la subida de los fletes.
Pese a ello, el presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Minas de Antracita, Apema, Manuel Lamelas, cree que estos datos coyunturales no permiten pensar en el fin de la larga crisis de la minería, porque “nuestro carbón es un carbón que cuesta extraerlo”. En cualquier caso cree que la situación actual “es una inyección de oxígeno” para el carbón nacional.
Por su parte, el portavoz de la patronal Carbunión, Samuel Gutiérrez, asegura que emplear el término rentable es inapropiado para referirse al carbón nacional, aunque reconoce que sí “es más económico que el carbón internacional. Efectivamente, el carbón autóctono tiene un precio más barato que el carbón internacional puesto en central” . Según Gutiérrez, a la vista de estas cifras, “lo que procede es que los precios del carbón autóctono suban también para acercarse al valor del mercado internacional y de esa forma se equilibre la diferencia de precios”.
El coste de generación energética para las térmicas según el tipo de combustible empleado pasó en un año de 21 a 55 euros (un aumento del 162%), en el caso del carbón de importación, y de 30 a 60 euros en el caso del gas (un 100%). Sumándole a estos costes el impacto de los derechos de emisión de dióxido de carbono obligados por el cumplimiento del Protocolo de Kioto, el precio por megavatio/hora alcanza actualmente los 77 euros para el carbón de importación y los 64 para el gas natural.
Factores estratégicos
A la estricta rentabilidad del carbón nacional hay que añadir otros factores estratégicos no menos importantes, pues un incremento de protagonismo del mineral autóctono en el ‘mix’ energético supondría una reducción de la enorme dependencia exterior de España en materia energética, con un 80 por ciento del total de las materias para producciónde energía procedente de otros países.

La Crónica

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